miércoles, 29 de agosto de 2012

BTT EN EL PIRINEO. LIEBRES EN LA ZONA ZERO (2012)

Este verano solo dos atrevidas y viajeras liebres (Paco Díaz y Andrés) hemos dispuesto de tiempo y permisos laborales y familiares para volver con nuestras bicicletas de montaña al Pirineo. En este caso, y a diferencia de los años anteriores en los que realizamos rutas circulares de gran recorrido, hemos elegido Aínsa para pedalear por distintas rutas del centro BTT Zona Zero.
El esfuerzo y la dureza física de las rutas ha sido menor que en años anteriores, aunque esto ha estado sobradamente compensado por la intensidad de las sensaciones vividas y por la exigencia técnica (y psíquica) de pedalear por una mayor longitud de senderos, con tramos de naturaleza, firme, altitud y ambiente variado.
La Zona Zero es un centro de BTT, enclavado en Aínsa, que cuenta con 8 rutas balizadas y 5 con seguimiento GPS, en un terreno especializado en el enduro, donde las rutas discurren por la mayor cantidad posible de senderos. La dificultad de la ruta (total y por tramos) viene clasificada por colores (verde, azul, rojo y negro).
En nuestro caso, y para bikers medios (no endureros aunque habituados a senderos), los tramos rojos de la ruta 7 (Bajo Peñas) han resultado ciclables, salvo pasos aislados, en su práctica totalidad.
En el entorno próximo proponen otras rutas a mayor altitud tales como algunas de las realizadas por nosotros (Canal del Cinca y Miradores Ordesa-Pista de las Cutas).

Alojamientos: La web de la Zona Zero contiene información sobre alojamientos asociados a este proyecto. En nuestro caso, y con buen acierto, elegimos el Hotel Mesón de L´Aínsa donde, además de buenas instalaciones, trato familiar y buena comida, Ramón (biker local buen conocedor de la Zona Zero) gustosamente nos facilitó información de rutas y tracks.
Reparaciones-Repuestos: Como pudimos comprobar, la tienda Intersport L´Aínsa proporciona un excelente servicio de repuesto y reparaciones.
Más información:

Ruta 1: Miradores de Ordesa-Pista de las Cutas
Desde Escalona, tomamos la carretera HU-631 en dirección Fanlo. Cruzamos la espectacular garganta del río Bellós (por donde discurre la Transpirenaica en btt) y llegamos al aparcamiento del mirador del Cañón de Añisclo (cota 1.040 m), donde aparcamos el coche.
Comenzamos a pedalear (9:15 h) por la carreta a Fanlo y tomamos el desvío hacia Nerín en donde coincidimos con López (ciclista de Banyeres). Una vez pasado Nerín tomamos una pista (Pista de las Cutas que, incomprensiblemente, y pese a estar abierta al tráfico de autobuses y vehículos todo-terreno turísticos, no ha estado autorizado el tránsito de bicicletas hasta hace unos pocos años), en prolongado, aunque suave ascenso, que alcanza Cuello Arenas y continua ganando altura, para posteriormente desviarnos hacia el primer mirador sobre Ordesa, en el límite del parque nacional.
Hasta aquí, han sido 16,8 km y unos 1.200 m de desnivel (casi dos veces la ascensión a nuestro Carche), de monótona y sufrida pista, a remolque de mis compañeros, amenizada con amplias vistas del valle y recompensada, con creces, con la contemplación de esta maravilla natural que es el Parque Nacional de Ordesa.
Continuamos pedaleando, ya por encima de los 2.100 m de altitud, en llaneo y cortas subidas o bajadas, visitando distintos miradores y embriagados por la majestuosidad de estos paisajes.
El día avanza (y el calor también), por lo que nos despedimos de López y comenzamos el descenso. Circulamos inicialmente por la misma pista de ascenso, hasta que nos desviamos por un PR en dirección Fanlo, en donde disfrutamos, en su primer tramo, de agradables pedaleos por deliciosos prados.
A estos prados iniciales, le sigue un tramo, más largo de lo esperado, de estrechamientos y escalones rocosos en los que nos vemos obligados a arrastrar nuestras bicis. Posteriormente, el terreno y la ciclabilidad mejoran y, salvo algunos zigs-zags o tramos cortos de fuerte pendiente con abundantes piedras sueltas, retomamos el descenso sobre nuestras bicicletas.
Llegamos a un camino y, poco después, a la carretera HU-631. Nos desviamos hacia Fanlo, donde tomamos unas frías cervezas y repostamos agua.
Retomamos la carretera y a pocos kilómetros nos desviamos por el GR-15 hacia Nerín. El calor aprieta y el sendero, con frecuentes tramos no ciclabes, nos obliga a montar/desmontar continuamente de la bici, a lo que se le suman tramos muy cerrados por la vegetación, en los que sufrimos continuos arañazos. Paramos a comer y poco después llegamos a Nerín, donde nos reponemos, al menos parcialmente, de este estoico tramo (2,9 km).
Continuamos por el GR, en fantástico y ciclable descenso, hasta alcanzar una pista y desviarnos, en ascenso, hasta Sercué. Desde aquí, iniciamos un sendero de descenso, con algunos tramos cerrados y no ciclables, cruzamos el río Aso por un histórico puente y, tras un corto tramo de ascenso (no ciclable), alcanzamos la carretera. Solo nos restan unos pocos kilómetros por carretera hasta llegar, sudorosos y agotados, al vehículo (16:00 h).
Fantástica y dura ruta, con inmejorables y majestuosas vistas del Parque Nacional de Ordesa, en la que se recomienda, al objeto de evitar tramos no ciclables y el GR-15 entre Fanlo y Nerín, la variante propuesta en  http://www.bttpirineo.com/rutas-btt/miradores-de-ordesa.

Track:
https://dl.dropbox.com/u/22791898/BTT/MIRADORES%20ORDESA.gdb
Datos prácticos:
Longitud: 45,0 km
Desnivel acumulado: 1.750 m         Altura máxima: 2.250 m
Tiempo (en mov): 05:15 h.              Tiempo total: 06:45 h.
Velocidad media (mov):  8,7 km/h
Dificultad física y técnica: Alta.

Ruta 2: Canal del Cinca
Ruta única y espectacular que discurre, en aproximadamente la mitad de su recorrido, por un camino de servicio paralelo al Canal del Cinca.
Dejamos el vehículo en Lafortunada y comenzamos a pedalear (8:50 h) por la carretera A-138 en dirección Bielsa. Cruzamos el desfiladero y túnel de Las Devotas (recomendable llevar luz y piloto trasero), pasamos Salinas y el cruce hacia Plan (valle de Chistau), hasta que después de 13 km llegamos a Bielsa (si se desea evitar el tramo de carretera debe contarse con 2 vehículos, uno al inicio -Bielsa- y otro al final -Lafortunada-).
Cruzamos el casco histórico de Bielsa y enlazamos, en prolongado ascenso, con la carretera hacia el valle de Pineta hasta que llegamos al embalse de Pineta (15,9 km).
Cruzamos el río Cinca por la presa y tomamos inicialmente una pista e, inmediatamente a continuación, un agradable sendero por un frondoso bosque de robles, pino rojo, bog, etc.
Este sendero, ciclable en su práctica totalidad, discurre a media ladera, con ascensos y descensos puntuales, a una cota de 1.100-1.150 m, siguiendo el trazado del Canal del Cinca, con algunos tramos de porteo o en los que es necesario la ayuda de pasamanos.
Atravesamos canchales, bosques y espectaculares acantilados rocosos y túneles.
El sendero sigue y sigue, el tiempo pasa y el cuentakilómetros se ralentiza. Los sentidos en continua alerta en los tramos aéreos y en ocasionales estrechamientos del sendero, confiando en la bicicleta y en el propia inercia de nuestro movimiento.
Pequeños despistes de itinerario y algún tramo sobre el propio canal. Impresionantes vistas del valle, montañas circundantes y del trazado del recorrido que ya hemos realizado y del pendiente de realizar, en la distancia, sobre la propia ladera.
Llegamos a un cruce de senderos. Un GR que se dirige, en descenso, hacia Salinas y, en ascenso, con un tramo inicial de porteo, hacia Tella y un PR, en dirección a Tella, por el Canal del Cinca, que será por el que continuemos. Alternamos tramos de porteo, en canchales y algún que otro repecho, con tramos rápidos sobre el canal y otros cómodos, aunque estrechos senderos, con una ciclabilidad inferior al primer tramo ya recorrido.
Salimos a una pista y, en ascenso, alcanzamos la carretera, desviándonos para visitar el cercano dolmen de Tella. A continuación seguimos hacia Tella por carretera (1,3 km).
Reponemos agua, tomamos unos refrescos (de una máquina expendedora, ya que el bar para nuestra desilusión está cerrado) y comemos el bocata de la jornada. Desde Tella (cota 1.337 m) iniciamos un vertiginoso descenso hasta Lafortunada (cota 718 m), por una de las 7 variantes de descenso existentes, conocida por los bikers locales como "Tella Express".
Un sendero GR, a tramos bastante pedregoso, aunque prácticamente ciclable en su totalidad, en el que ponemos a prueba nuestra habilidad y frenos y que nos obliga a realizar alguna que otra parada para relajarnos muscular y mentalmente.
Alcanzamos una pista en pronunciado descenso (pista reciente que ha destruido parte del GR y ha restado atractivo y dificultad al descenso). Nos desviamos por un PR, en continuos zigs-zags, y con abundantes piedras que, dado que son planas, no dificultan excesivamente la ciclabilidad, aunque provocan la rotura de un radio de la rueda trasera de mi bicicleta.
Por fin, agotados, saturados y satisfechos por el descenso, alcanzamos nuevamente Lafortunada (14:10 h).

Una ruta espectacular, una maravilla para los sentidos, con deliciosos y agradables tramos de bosque y vertiginosos descensos que, pese a lo que pueda parecer por las fotos de los tramos aéreos e impresionantes acantilados rocosos por los que discurre el recorrido, no reviste mayor peligro que otras rutas de btt, cuyo límite, como siempre, lo pone el propio ciclista.
Track:
https://dl.dropbox.com/u/22791898/BTT/CANAL%20DEL%20CINCA.gdb
Datos prácticos:
Longitud: 39,5 km
Desnivel acumulado: 996 m          Altura máxima: 1.337 m
Tiempo (en mov): 04.10 h.            Tiempo total: 05:20 h.
Velocidad media (mov): 9,8 km/h
Dificultad física y técnica: Media-Alta. 

Ruta 3: Bajo Peñas (Ruta 7. Zona Zero)
Para este día, y teniendo en cuenta que teníamos pendiente el viaje de vuelta, decidimos pedir consejo a los bikers locales para que nos recomendasen una ruta de corta-media duración de las balizadas en el entorno de Aínsa. Así, nos decantamos por la ruta nº 7 (Bajo Peñas), con 26 km de recorrido, 830 m de desnivel acumulado y unas 3:00 h de duración, perfectamente señalizada, descartando la idea inicial (Vuelta a la Peña Montañesa).
La ruta comienza junto al puente del río Cinca por unas pistas inicialmente asfaltadas y posteriormente de tierra. Seguimos por el curso de una rambla y unos senderos, en exigente ascenso, hasta que, llegados a Cuello de S. Beturián, se convierten en un fantástico descenso, entre bosques, con algunos pasos técnicos y un tramo final en margas que nos sitúa en el lecho de una rambla (barranco de los Molinos).
Continuamos por unos caminos que enlazan con una carretera. Pasamos por Los Molinos y continuamos en ascenso, por carretera, hasta llegar a Oncins (14,8 km. 1.075 m.), máxima altura de la ruta. Reponemos agua, unos refrescos en un bar y, a partir de aquí, comenzamos un divertido y fantástico descenso, prácticamente todo lo que nos queda de recorrido, por unos PR que nos conducen a Torrelisa y Pueyo de Araguás.
Más senderos, con tramos rápidos, toboganes, bosques y fotogénicas lomas desnudas en margas que nos hacen disfrutar como nunca de la btt.
A nuestro pesar, todo lo bueno se acaba, y volvemos a alcanzar la pista asfaltada inicial que seguimos hasta llegar nuevamente a Aínsa.

Con esta excelente y divertida ruta, con 15 km de senderos, de esos que deseas que no se acaben nunca, ponemos fin a nuestro periplo pirenaico-betetero de este año, con muy buen sabor de boca, y con ganas de volver a la Zona Zero. Para otra vez, nos plantearemos el reto de la variante "Purgatorio" de la Vuelta a la Peña Montañesa, cuyo tramo inicial/final coincide con esta ruta 7, hasta completar 77 km de recorrido, 2.450 m de desnivel acumulado y un 40% de senderos.
Track:
Ruta 7 (Bajo Peñas) de la Zona Zero (ver: http://www.bttpirineo.com/)
Datos prácticos:
Longitud: 26 km
Desnivel acumulado: 830 m         Altura máxima: 1.075 m
Tiempo (en mov): 02:45 h.            Tiempo total: 03:30 h.
Velocidad media (mov): 10,0 km/h
Dificultad física y técnica media. 

Y ahí dejo un vídeo-montaje de fotografías:

No hay comentarios: