martes, 17 de marzo de 2015

VUELTA Y ASCENSIÓN AL MONTE PONOIG (SENDERISMO)

En las estribaciones meridionales de la Sierra de Aitana se agrupan un conjunto de gigantes rocosos, Ponoig, Puig Campana y Sanxet, que configuran un relieve y unos paisajes más propios de otras latitudes, tales como Alpes, Pirineos o Dolomitas, entre los que discurren distintos senderos y recorridos. La combinación de algunos de estos senderos nos permite dar la vuelta y ascender a una de estas montañas, el Monte Ponoig, entre un laberinto de verticales paredes y moles rocosas.

Dejamos el coche en el parking situado junto al helipuerto de la falda meridional del Ponoig. Para ello accedemos, desde una de las rotondas de la carretera de circunvalación de La Nucía-Polop (CV-70), a la parte alta de una de las urbanizaciones situadas en la ladera.
Comenzamos a caminar (cota 400 m) por un agradable sendero paralelo a un barranco (10:25 h). A nuestra derecha, al otro lado del barranco, algunas cordadas de escaladores surcan las grandes paredes del Ponoig, Torre de Enmedio y Tozal de Levante.
Seguimos ascendiendo hasta coronar un collado (Km 2,3. Cota 920 m). Hemos superado el tramo de mayor desnivel de todo el recorrido, hacemos una parada y nos reconfortamos con las amplias vistas de la costa alicantina.
Continuamos caminando por un sendero a media ladera, el Cigarrí, bajo la cresta cimera y la cumbre del Ponoig y disfrutando de privilegiadas vistas de la bahía de Benidorm.
Llegamos a un cruce y nos desviamos a nuestra derecha, en zigzagueante ascenso, hasta el collado del Llamp (977 m).
Una parte del grupo tomamos un sendero poco marcado, señalizado con puntos rojos intermitentes y con alguna aislada y corta trepada, que, en exigente y entretenida subida, va ganando altura junto a la cresta cimera del Ponoig.
Finalmente llegamos a la cumbre del Monte Ponoig (1.182 m), cuya única señalización visible consiste en un triángulo amarillo pintado sobre una roca.
Desconocida cumbre, o cumbre secundaria relegada parcialmente al olvido debido a la cercanía del Puig Campana, que ofrece unas privilegiadas vistas de las montañas y la costa alicantina y que, pese a los años y las escaladas transcurridas, no había tenido el placer de ascender.
Acometemos el descenso y desandamos parte del recorrido hasta el collado del Llamp. Desde aquí un cómodo sendero nos conduce al collado de la Coveta de la Moscarda, junto a los imponentes y verticales farallones rocosos de la ladera sur del Sanxet.
Paramos a comer, resguardados del viento, en la Coveta de la Moscarda y, poco después, retomamos el descenso por un colorido sendero paralelo al barranco de Gulapdar, encajado entre los imponentes relieves y paredes rocosas del Sanxet y el Ponoig.
Llegamos a la conocida "Casa de Dios" (Mas del Pi).
Seguimos descendiendo por una pista, llegamos a un mirador y pasamos junto a la zona de escalada de El Castellet. A unos cien metros después de pasar el cartel de la zona de escalada, nos desviamos a derecha por un tranquilo y bucólico sendero entre un denso bosque de pinos. Ascendemos un fuerte, aunque corto, repecho y posteriormente continuamos andando a media ladera o en ligero descenso hasta que alcanzamos nuevamente el lugar donde habíamos dejado los vehículos (16:00 h).

En resumen, una excursión y una ascensión muy recomendable, entre grandes farallones y moles rocosas, que permite disfrutar de increíbles vistas de las montañas y la costa alicantina. Sin duda, una excursión y una ruta senderista imprescindible de la geografía alicantina. 

Datos prácticos:
-Track (wikiloc): Aquí.
-Distancia: 13,6 km                               -Tiempo en movimiento: 04:30 h.
-Desnivel acumulado: 755 m                -Altura máxima: 1.182 m
-Dificultad: Media. 
-Observaciones: sendero poco marcado y algún paso aislado de trepada en el ascenso a la cumbre.

martes, 10 de marzo de 2015

ESPUBIKE (UN COMPLETO RECORRIDO BTT POR SIERRA ESPUÑA)

Hacía ya un tiempo, desde los inicios de su andadura, que tenía pendiente de realizar Espubike, primera ruta de bicicleta de montaña "organizada" de la Región de Murcia; y es que todas, absolutamente todas las experiencias ciclistas anteriores por la zona, me habían permitido comprobar la certeza de esa máxima que circula por todo el colectivo ciclista: Sierra Espuña nunca defrauda y cualquier ruta es, en si misma, todo un acierto.
En el track oficial, una vez analizado, se echan en falta algunos de los senderos más representativos (las 1.000 o 2.000 curvas) o técnicos (la salvaje) del Parque; y es que Sierra Espuña está plagada de decenas y decenas de kilómetros de senderos empleados antaño para la reforestación de la sierra, conservados en perfecto estado e ideales para la práctica de una amplia variedad de deportes de montaña. Dicha ausencia se entiende, además de por posibles consideraciones ambientales, porque hay tanto para elegir que no se puede abarcar todo. Ahora bien, no coronar una de las cumbres (ciclables) del Parque, como es el Pedro López, y poder disfrutar de sus vistas, o no visitar uno de los rincones más singulares y de especial belleza, como los Pozos de la Nieve de Murcia, no tiene excusa, máxime si no se conoce o es la primera vez que se visita la zona. Nada que no se pueda solucionar fácilmente, como hicimos nosotros, añadiendo una variante (Pedro López-Pozos de Murcia) al recorrido de la tercera etapa oficial. 
Las características de la ruta (145 km y 4.000 m de desnivel acumulado), la versatilidad de fraccionamiento en etapas de la misma y la ausencia de tramos técnicos en exceso, sumado al benigna clima de la zona, la hacen atractiva para toda época del año y para un amplio abanico del colectivo ciclista; en tres "cómodas" etapas, para ciclistas medios, en dos duras etapas, con desniveles diarios de unos 2.000 m, para ciclistas avezados, y en una jornada, rutón o desafío, para aquellos bikers-pro en excelente estado de forma y aficionados a los ultramaratones. Así que, a que esperas para dar pedales, Sierra Espuña y la primavera ya están aquí. 

Día 1 (Etapa 3 oficial): Casas Nuevas-Alquerías

Dejamos el coche en la Hospedería de Casas Nuevas y comenzamos a pedalear por una tranquila carretera, la cual abandonamos a los pocos kilómetros por una pista forestal. A nuestra izquierda, la Umbría del Bosque y los riscos rocosos que la circundan, recóndito y desconocido paraje que habrá que visitar en alguna posterior excursión senderista.
Comienza el ascenso, llegamos al Portillo, cruzamos una valla y continuamos por un agradable camino-sendero que nos conduce a las ruinas de Malvariche y su privilegiado entorno.
Acometemos, a partir de ahora, una de las más largas subidas de la ruta por una tranquila pista forestal. En este caso, y a diferencia de la anterior ocasión, me permito disfrutar de un tranquilo ascenso, amenizado con paradas varias y toma de fotografías, y recreándome en cada estrato y cada cresta o repliegue rocoso de esta adusta y abrupta vertiente norte de Sierra Espuña. 
Llegados al collado del Humero (1.382 m) abandonamos el recorrido oficial y continuamos ascendiendo por un camino, a tramos roto, técnico y exigente, que va ganando altura y nos conduce, después de un nuevo desvío, a la cumbre del Pedro López (1.568 m).
Desde allí distinguimos, por una parte, la corola blanca que acompaña, en estas fechas, a las cumbres de La Sagra, Cazorla y Sierra Nevada y, por otro lado, las bahías de Mazarrón y Águilas. A nuestras espaldas las sierras interiores de nuestra región, Ricote, La Pila, El Carche, etc.
Retornamos a la actividad y continuamos por distintos caminos con impresionantes vistas del Morrón y las altiplanicies kársticas que nos rodean. Llegamos a un collado, bordeamos el Morrón y pasamos junto a los Pozos de Cartagena y collado Mangueta. 
Unas cortas subidas y bajadas después estamos comiendo en los bucólicos prados de los Pozos de Murcia.
Retrocedemos parte del camino de ida, hasta alcanzar el collado de la Poza del Pino Blanco, y comenzamos un rápido descenso.
En el camino del Pinillo nos unimos nuevamente al recorrido oficial y continuamos descendiendo hasta llegar a la Casa Forestal de La Carrasca. Nos sorprende un agradable tramo de sendero hasta la Casa de Don Blas, volvemos a abandonar el recorrido oficial y nos dirigimos por un zigzagueante sendero hasta el collado Pilón. 
Desde aquí, un impresionante y vertiginoso sendero, ya conocido de nuestra reciente sierra espuña mon amour, nos conduce hasta el campamento, aula de la naturaleza y cabañas de madera de Las Alquerías, fin de esta primera jornada.
El alojamiento, tipo albergue, se compensa sobradamente con la calidad (y cantidad) de la cena y el desayuno que nos ofrecen en el restaurante aledaño (Los Donceles). Muy recomendable.

Datos prácticos:
Distancia: 36 km
Desnivel acumulado: 1.360 m                    Altura máxima: 1.572 m
Tiempo (en mov): 03:30 h
Dificultad: Media

Día 2 (Etapa 4 oficial): Alquerías-El Berro

Abandonamos Las Alquerías por un empedrado, irregular e incómodo sendero que nos lleva hasta una amplia pista forestal. Después de varios kilómetros por la misma nos desviamos por un largo tramo (3,6 km) de agradable y relajado sendero.
Salimos a una casa forestal y el camino de Los Algarrobos e iniciamos una de las dos largas subidas que nos esperan en esta jornada. Un pesado e interminable ascenso (unos 450 m de desnivel) por pista (que resultaría evitable por un exigente y zigzagueante sendero en ascenso que ya tuvimos ocasión de probar, en descenso, en sierra espuña mon amour) nos conduce al collado de la Zurra y nuevamente a la pista por la que discurre el GR-252. En mi opinión, esta subida es uno de los tramos menos atractivos de todo el recorrido.

Unos rápidos kilómetros de pista nos llevan hasta la carretera principal de la sierra y, un poco después, nos encontramos rodeados de otros ciclistas y tomando un merecido almuerzo, regado con abundante cerveza, en el bar de la Fuente del Hilo.
Posteriores senderos, primero en descenso hasta el río Espuña y posteriormente en ascenso, nos acercan hasta el área recreativa de La Perdiz y el puente colgante de la senda del dinosaurio.
Comenzamos otra de las largas subidas del día (5,5 km y 450 m de desnivel) por la pista que discurre por el fondo del barranco de Leyva, no por conocido menos atractivo, siempre amenizada con las impresionantes vistas de sus verticales paredes.
 Termina el ascenso y llegamos a collado Blanco.
 Reponemos fuerzas y agua un poco más abajo, en Fuente Blanca.
Poco después nos encontramos pedaleando por otro singular y privilegiado rincón de Sierra Espuña, Prado Mayor.
Un corto ascenso, hasta un collado, y enlazamos, ya en larga bajada, con la pista, de amplias y panorámicas vistas, que discurre junto al barranco de la Hoz.
Salimos a Prado Chico, continuamos el descenso por una pista asfaltada y posteriormente nos desviamos por unos caminos, junto a zonas agrícolas y viviendas, no exentos de algunos cortos y fuertes repechos, que nos llevan finalmente hasta la pedanía de El Berro.
Nos alojamos en una confortable cabaña de madera de El Camping de El Berro, en donde se percibe buena predisposición y un trato excelente a los ciclistas que realizan la Espubike. La cena, buena y abundante, en uno de los bares (el más cercano al camping) del pueblo.

Datos prácticos:
Distancia: 52,6 km
Desnivel acumulado: 1.350 m                        Altura máxima: 1.238 m
Tiempo (en mov): 03:55 h
Dificultad: Media

Día 3 (Etapas 1 y 2 oficial): El Berro-Casas Nuevas

La mañana del tercer día comienza con fuertes repechos, por caminos con tramos hormigonados, que nos conducen hasta una carretera. Poco después, ya en ligero descenso, nos desviamos por tranquilos y apacibles senderos ingenieriles. A poco de pasar casa Leyva, en vez de seguir la carretera, nos salimos del recorrido original por un bonito sendero, ya transitado en anteriores ocasiones, que discurre junto al lecho del barranco de Leyva. 
Después enlazamos con un largo tramo de descenso por entretenidos senderos forestales o ingenieriles de la margen sur del río Espuña. 


Pasamos el Canal del Taibilla, circulamos junto al Canal del Trasvase y comenzamos a alejarnos de Sierra Espuña por diversos caminos. Cruzamos una carretera y acometemos una fuerte, aunque corta, subida, para continuar posteriormente bordeando la vertiente septentrional de la Sierra de la Muela. 
Unos pocos kilómetros después nos sorprenden unos paisajes desérticos, con barrancos y laderas de formas caprichosas, que inmediatamente nos transportan a otras latitudes.
Es un placer pedalear y dejarse llevar por estos entretenidos senderos que, a buen seguro, habrá que conocer en mayor profundidad en alguna otra próxima salida de turismo btt del club.
Sorprendentes formas de erosión nos envuelven en este singular paraje protegido (Barrancos de Gebas), salpicado por una intrincada red de ramblas y cursos intermitentes de agua.
Salimos del curso de la rambla de Algeciras y por un camino vecinal asfaltado llegamos a Gebas (Km 25,5. Fin de la primera etapa oficial). Nos desviamos unos cientos de metros del recorrido y acabamos recalando en un bar. 
Retomamos la marcha, después del almuerzo, por caminos y pistas agrícolas que, salvo puntos aislados, corresponden al tramo, de unos 10-12 kilómetros de longitud, de menor interés de todo el recorrido.
Un corto tramo de carretera y nuevamente nos acercamos y comenzamos a circular por las pistas forestales de la vertiente septentrional de Sierra Espuña.
Suave, rápido y cómodo recorrido, junto a rocosas y agrestes umbrías, en el que solo nos resta superar algunas cortas y moderadas subidas, para terminar llegando a Casas Nuevas por el barranco de la Fuente y rambla de Malvariche.
Finalmente llegamos a la hospedería de Casas Nuevas, donde habíamos dejado el coche, a una hora todavía prudente (14:00 h). A tiempo de comer, tomar unas cervezas y celebrar la ruta, antes de regresar a nuestras madrigueras.

Datos prácticos:
Distancia: 56,6 km
Desnivel acumulado:  1.200 m                   Altura máxima: 760 m
Tiempo (en mov): 04:05 h
Dificultad: Media


Track del recorrido (Espubike + variante Pedro López-Pozos de Murcia): Aquí.

Sierra Espuña, una de las grandes montañas de la geografía murciana, evidentemente no es Pirineos o Cazorla, no tiene ríos, ni cascadas, pero, sin embargo, posee una serie de atractivos que la hacen especialmente interesante para la práctica de la bicicleta de montaña. Paisajes kársticos, prados de montaña, rincones solitarios, verticales paredes de escalada, bosques, riberas y umbrías de densa vegetación mediterránea y, en especial, toda una extensa red de senderos forestales o ingenieriles, de decenas y decenas de kilómetros, que permiten disfrutar, como en pocos otros lugares, del placer de pedalear y dejarse llevar en bicicleta por los mismos.

En definitiva, una ruta muy recomendable e ideal, realizada en tres etapas, para iniciarse en recorridos de bicicleta de montaña de varios días. En el caso de plantearla en dos etapas, y para un equilibrado reparto del desnivel acumulado entre ambas, se recomienda dividirla en los tramos: Gebas-Alquerías y Alquerías-Gebas.

Por último, añadir que Espubike presenta, en comparación con otras rutas organizadas o comerciales al uso, menor distancia y desnivel acumulado que ellas y carece de tramos o senderos excesivamente técnicos, aunque no por ello está exenta de entretenidas y divertidas raciones diarias de senderos ingenieriles, de esos que tanto abundan en Sierra Espuña. No obstante, resultaría de interés y es de esperar, como ha sucedido con esas otras rutas clásicas mencionadas (Pedals de Foc, Pirines Epic Trail, etc..), que, en el futuro, se incorporen distintas variantes y una versión Espubike Extrem, a la que se sumen kilómetros y desniveles adicionales por algunos de los senderos más representativos del parque (las 1.000 o 2.000 curvas) y que se echan en falta en el recorrido actual.